La receta de hoy es genial para liberar energía, ya que como su nombre dice lleva 80 golpes o más en su elaboración, es la manera de activar a la levadura; impresiona cómo cambia su textura según va siendo golpeada. Yo la he rellenado esta primera vez de mantequilla y azúcar, pero puede elaborarse de los que se quiera: chocolate, mermelada, canela… y también de salado: queso, jamón… me imagino que seguiré experimentando con ella, seguro que la próxima vez será de cabello de ángel, ya os contaré. Es una receta que lleva mucha levadura en proporción a la cantidad de masa, me imagino que por eso no hace falta respetar los tiempos de reposo típicos para que leve. El tiempo que tardé desde que le di los golpes y preparar el relleno hasta estirarla con el rodillo, la masa subía sola en la mesa de la cocina que parecía mentira. Por eso, apuntaros esta receta entre vuestras favoritas para cuando el tiempo vaya contra reloj y no podáis esperar a su fermentación, será idea