Aquí estoy de nuevo, tras unas
semanas sin publicar que no sin cocinar!!! Presentándoos una receta espontánea
que ha ayudado a “reciclar” unos ingredientes que estaban en mi cocina: unos
plátanos muy maduros y pan duro ¿qué podemos hacer? Tal y como decía la abuela
de una tía mía: “Para aprovechar estos ajitos, vamos a guisar un conejito” y
eso hicimos.
Además de poder aprovechar dichos
ingredientes resulta ser una receta muy
buena para esta época de calor, pues una vez hecha aguanta perfectamente en la
nevera durante varios días en un recipiente hermético, es baratita, divertida y
en algunos pasos os pueden echar una
manilla esos enanos que ahora mismo no tienen clase. Y más tarde puede convertirse
en su merienda favorita, porque además de ser casera es exquisita.
Dentro de la cocina el saber
“reciclar” es un forma de convertirnos en alquimistas, un don que hay que desarrollar, se trata de
confianza en una misma, de continuar a pesar de que una receta no haya
resultado como esperabas. Nunca sabes cuál va a ser dicho resultado, al igual
que sabes que nunca le podrás volver a dar ese mismo sabor, por ello esta
receta no llevará pesos exactos, dependerá de vuestra destreza para darle un
toque personal.
Son este tipo de elaboraciones las
que me inspiran y proporcionan esa fuerza para ponerte el delantal, respirar y
disfrutar de lo que haces. Con estas semanas de medio parón por cuestiones
laborales había disminuido esa esencia, y el simple hecho de derretir chocolate
con nata durante este fin de semana hizo que me reconectara. La cocina es una
de mis formas de meditación.
Si llegas a ese punto de
centramiento la creación surgirá sola, parece que los ingredientes te llaman
“Eh! Ponme a mí”. ¡Puede sonar exagerado pero experimentarlo y disfrutar es
todo uno!
Y ahora, redactando esta receta desde el parque, bajo los pinos y
rodeada de lagos y buenas praderas que aportan ese fresquito que tanto nos
gusta, pasamos a los ingredientes.
Encantada de volver por aquí!!!
Buñuelos de plátano
Ingredientes:
- 4 o 5 plátanos maduritos
- 1 barra de pan
- 3 huevos
- ½ vaso de los de vino de leche
- 2 cucharadas soperas de azúcar
- 1 toque de vainilla en polvo
- Canela y azúcar blanca para rebozar
- Aceite de oliva suave para freír
Elaboración
En una fuente honda echamos los plátanos pelados y troceados,
con los huevos, la leche, la vainilla y el azúcar. Se tritura con la batidora
hasta dejar una masa tipo gachuela. El segundo paso será partir el pan en
pedacitos y añadirlo, habrá que dejarlo esponjar unos 20 minutos.
Pasado ese tiempo se tritura,
quedando una masa homogénea y ya con una textura más consistente al haberle
añadido el pan.
En una sartén calentamos el
aceite y en un plato hondo mezclamos la canela y el azúcar para el último
toque. Con una cuchara grande vamos echando en la sartén pequeñas porciones y
las vamos friendo por ambos lados, dándole vueltas.
¡Qué rica receta de aprovechamiento!
ResponderEliminarA veces me da lástima que nunca nunca nunca se nos pasen los plátanos, porque hay tantas recetas deliosas con ellos...
(Pero como en casa gustan verdes, se comen antes de que estén ni medio maduros.)
Un saludo,
Laura (Una dieta para glotones)
Jajajajaj Laura a mi me suele pasar lo mismo!!! me encantan con un toque durito, pero esta vez había superproducción en casa y no dio tiempo a gastarlos jejejeje.
EliminarUn dulce saludo!!!