Técula-Mécula o
“Para ti, para mí”, así se llama esta antigua receta que fue parte del gran
menú del día de la madre, este domingo pasado.
Hace muchos años
en una revista, mi madre se encontró con este reportaje, lo recortó y guardó.
Cuenta que esta receta es árabe y que lo encontró una mujer de Olivenza en 1930
en un baúl que era de su madre.
Con el tiempo se
abrió una pastelería en el pueblo y registró este nombre y la receta. La verdad
es que nunca he ido al pueblo ni he probado la tarta de esa pastelería, pero en
varias ocasiones mi madre ha mostrado interés por cómo sería el sabor de tan
peculiar historia y eso es un buen reto para mí, jejeje.
Investigando por
internet vi que en el blog de Asopaipas, que os recomiendo enormemente, tenía
una receta de una mujer de ese mismo pueblo, bueno no será la receta original
pero me imagino que en el propio pueblo será una receta que habrá pasado de
generaciones en generaciones.
Con la
información de dicho recorte y la receta que encontré en el blog mencionado, me
dispuse el domingo por la mañana a realizar el mejor postre para la comida del
día de la madre. Todos quedaron encantados y realmente, su sabor es muy
tradicional, los ingredientes básicos son la almendra molida y las yemas de
huevo ¿Qué postre antiguo de nuestra cultura no lleva alguno de esos dos
ingredientes? Su sabor es entre yemas de Santa Teresa, Turrón de Jijona… con un
último toque a hojaldre, artesano claro.
Técula-Mécula
Ingredientes
Para el hojaldre
Para el relleno
- 500 grs. de azúcar blanca
- 250 grs. de agua
- 9 yemas de huevo
- 1 huevo completo
- 250 grs. almendra molida
- 2 cucharadas de manteca de cerdo
- 3 cucharadas de harina
Elaboración
Lo primero de
todo será hacer la base de hojaldre, se puede comprar ya hecha, pero si queréis
un sabor más auténtico se puede hacer, para ello os dejo el enlace de la Bayonesa de Cabello de Ángel y allí claramente se explica paso a paso.
El siguiente
paso será realizar el relleno, lo primero será preparar el almíbar, para ello
utilizaremos los 500
gramos de azúcar y 250 gramos de agua. Sé
que es gran cantidad de azúcar, pero a la hora de realizar un almíbar es
necesario duplicar la cantidad de azúcar en relación a la de agua y estas
cantidades para el tamaño de la tarta está bien proporcionado.
Para hacer el
almíbar el azúcar tiene que estar a punto de hebra y eso ¿Qué es? Bueno pues lo
voy a explicar yo y la ampolla que me salió en el dedo anular de la mano
izquierda, vamos, principios básicos que yo no cumplí jejejejeje. Se coloca en
un cazo el azúcar y el agua, apenas se remueve y se deja que llegue a
ebullición y reduzca en tamaño. Para comprobar que el azúcar está a punto mi
dedo os diría que lo importante es mojaros dos dedos en agua fría y tocar la
punta de la cuchara que esté manchada, si al separar los dos dedos se forma una
hebra y al querer juntar juntarlos otra vez pincha un poco, ya está en su
punto. Parece fácil y lo es, sólo que el paso del agua fría hará que vuestros
dedos no se quemen. Os lo prometo, he aprendido la lección y mi dedo también.
Cuando ya está
el almíbar, se apaga y se deja enfriar, mientras en una fuente se echan las 9
yemas y el huevo completo y se baten ligeramente. Removiendo el almíbar se
echan los huevos batidos y se mezcla bien, luego poco a poco se incorpora la
almendra molida, la manteca y la harina. Se remueve con unas barillas para que
quede una masa homogénea y de color amarillo.
Todo este tiempo
el hojaldre puede estar ya como base en la fuente donde se va a hornear y en la
nevera, recordamos la importancia de la temperatura fría para la creación de
las capas de la masa. Se vierte el relleno y se moldean los bordes.
El horno debe
estar precalentado y estará en él entre 40-50 minutos a unos 170ºC. Yo el calor se lo puse
sólo abajo y como veis se le creo una costra por encima y se doró
perfectamente, si observáis que no se dora lo suficiente los últimos 10-5
minutos podéis darle también calor por encima.
Finamente se
saca del horno y se deja enfriar, nosotros lo tomamos un poco templada y estaba
genial, pero fría tampoco se queda atrás en sabor e historia.
Como siempre fue
un placer hacer una receta de nuestros antepasados.
Había escuchado un montón de veces eso de tecula mecula pero no sabia ni el porqué ni lo que significaba, no me acostare sin haber aprendido algo nuevo
ResponderEliminarSiiii estas recetas con historia es lo que tienen!!!
EliminarUno de los postres más exquisitos que he tomado, y fue en Trujillo.
Eliminaruno de los mas exquisitos postres que he tomado.
EliminarEs un dulce de "Olivenza " típicamente Oliventino con raíces portuguesas por su cercanía con Portugal
Eliminarpues esto debe estar de lujo!!! me gusrdas un cacho??... muaskkk gracias!!! ;)
ResponderEliminarPues claro!!! Si hay que acercarlo a Cádiz no me importa eh????
EliminarMuaaaa
Impresionante tarte, me muero por probarls
ResponderEliminarPues te animo!!!!
EliminarUn saludo!!!
Que buena pinta, impresionante
ResponderEliminarGracias Smith!!!!
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