Hoy es
el día del padre, día para recordar y honrar esa figura tan importante en
nuestras vidas: el padre. Sigas viviendo con él, esté en otro país o ya no esté
en este plano, sigue siendo un día especial, un día donde su recuerdo es fuerte
y por ello hay que celebrarlo.
Yo
todavía no me acostumbro a no tenerle al otro lado del teléfono, de la puerta...
no ha pasado un solo día sin que no haya notado su ausencia, hay días que se
lleva mejor y otros simplemente estás más nublado.
Pero
hoy vamos a celebrar su día, no será un día triste, porque él no nos educó en
la tristeza, nos enseñó a celebrar la vida, a disfrutar cada segundo de ella
rodeados de la gente que nos quiere, a disfrutar de una buena comida acompañada del vino adecuado y sobretodo de un buen dulce!!!! Por eso he hecho para desayunar
palmeritas de hojaldre.
Con un
buen vaso de leche fría comienzo este día de celebración, porque todos tenemos
un padre y el 50% nos viene de él y eso nadie lo puede negar tengas o no buena relación con él, esté o no contigo. Para mí es un
orgullo ser su hija y cada día que pasa se me ensancha más el corazón sintiéndolo.
Palmeritas
de hojaldre
Ingredientes:
- 1 plancha de hojaldre rectangular
-
Azúcar
blanca
Elaboración:
En una
superficie limpia y diáfana colocar una capa de azúcar blanca bien repartida.
Poner encima la plancha de hojaldre y con un rodillo adherir el máximo posible
de azúcar. Quitar la plancha de hojaldre, volver a colocar más azúcar en la
superficie y hacer la misma operación con el otro lado del hojaldre.
Si
queréis las palmeritas pequeñas cortar el hojaldre a la mitad por el ancho de
la plancha.
Para
realizar las palmeritas hay que ir doblando el rectángulo hacia dentro siempre
en partes simétricas, normalmente da para tres o cuatro dobleces. Debéis
aplastar bien la masa cada vez que la vayáis cerrando. Al final os debe quedar
como una especie tubo de masa de hojaldre y con un cuchillo bien afilado debéis
cortar rodajas cómo mucho de centímetro y medio.
A continuación se colocan
las palmeritas en la bandeja del horno (con su papel antiadherente), entre
palmerita y palmerita hay que dejar bastante separación porque rápidamente
crecen, como mínimo 5 o 6 centímetros de separación. Introducirlo al horno
precalentado.
En esta receta lo ideal es que estén tostaditas puesto que el azúcar se carameliza y las hace más crujientes y sabrosas, pero tenéis que estar muy atentos porque pronto se
queman. Lo más recomendable es un horneado arriba y abajo en todo momento para
que la masa crezca de igual manera por todos los lados y jugar con una
temperatura máxima entre 200º y 175º, es decir, constantemente vigiladas. Además es muy divertido ver su cocción, cuando colocas la masa en la bandeja no
da aspecto de palmeritas y luego rápidamente crecen y se expanden (como el
amor...). En el horno pueden estar unos 10-15 minutos.
Si
queréis cobertura de chocolate hay que dejar enfriar las palmeritas y a...
desayunar!!!!
Esta fotografía es de las últimas tomadas con mi padre, para mí está cargada de fuerza y significado.
¡Felicidades papá!
Que foto tan entrañable! Me gustó mucho tu blog, lo encontré buscando la receta de mi dulce favorito, los cortadillos de cidra. Te animo a que sigas publicando...tambien perdí a mi padre cuando era jovencita, pero siento siempre su ayuda y su animo en mi vida. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Florecilla!!! Muchas gracias por tu comentario. Espero que la receta de los cortadillos te sea útil, ya sabes que aquí estamos para dudas, comentarios y compartires...
EliminarEn cada acto qe hago en mi vida, veo la esencia de mi padre, sobretodo cuando hago dulces!!!
Un abrazo!!!