Ya por fin he sucumbido a la famosa tarta de tres chocolates, tenía mis reticencias: pensaba que su sabor sería muy contundente y además no soy muy amiga de usar gelatina, por eso no me había planteado prepararla. De sabor hay que reconocer que es intenso, abstenerse los no-amantes del chocolate y al final la he preparado porque encontré una receta que usaba la cuaja en vez de la gelatina; así que como estaba con mono de chocolate, este domingo fue el postre de la comida familiar. Está buenísima y me divertí mucho preparándola, es muy fácil, apta para principiantes, además toda tu casa toma un aroma a chocolate que es irresistible. Me gustó mucho ir viendo la diferencia de cada chocolate en su olor y sobretodo en su comportamiento, el chocolate negro fue la crema más espesa que empezó a cuajarse casi el en mismo instante en que apague el fuego, el chocolate con leche ya no tenía tanto cuerpo pero aun así era consistente y al final el chocolate blanco, el más graso era c